martes, 26 de agosto de 2014

Luciérnagas



«No me parece que la luciérnaga extraiga mayor suficiencia del hecho incontrovertible de que es una de las maravillas más fenomenales de este circo, y sin embargo basta suponerle una conciencia para comprender que cada vez que se le encandila la barriguita el bicho de luz debe sentir como una cosquilla de privilegio.»


Julio Cortázar: Capítulo I, Rayuela.



Es agosto, y en algún lado es verano. Las ruedas de las bicicletas giran en la oscuridad, y huele a pasto. Allá entre los árboles deben estar, empezando a titilar. Allá vamos, a verlas danzar.

Dicen que las luciérnagas aparecen en las noches de aire caliente. Dicen que las luciérnagas forman parte de los lampíridos, una familia de coleópteros polífagos... Dicen que tienen órganos bioluminiscentes en el abdomen, que esos órganos contienen luciferina y que cuando las luciérnagas respiran producen luz. Dicen que el oxígeno y la luciferina, en presencia de una enzima llamada luciferasa, producen luz… ¡Luz, luciferina, luciferasa!, ¡luz, luciferina, luciferasa!, ¡luz, luciferina, luciferasa!

¡Ah! ¡Pero no se trata tan sólo de respirar, para que se produzca la luz! Se trata de respirar con intenciones, con segundas intenciones. ¿Segundas intenciones? Dicen que intenciones románticas. O intenciones depredadoras, copiarse el patrón luminoso de otro bicho para hacer que se acerque y ¡zas!: Depredar. Eso es lo que dicen, aunque tal vez hay en este monte otros bichos que sólo brillan porque vinieron a brillar.

Detrás de la luz: Intención
Detrás de la luz: Voluntad
Prende y apaga, prende y apaga:
Amarillo verdoso
en aire caliente
Intermitente,
maravilloso:
Bicho de Luz.

¡Luz, luciferina, luciferasa!, ¡luz, luciferina, luciferasa!, ¡luz, luciferina, luciferasa! ¡Ya las vimos, ahora vamos de vuelta a casa!


Escrito por: Ambar Gómez
La foto: great-smoky-mountains-lightning-bugs en Firefly.org

No hay comentarios.:

Publicar un comentario